La motivación es la chispa que enciende el motor del aprendizaje autónomo. Sin ella, cualquier estrategia puede perder fuerza con el paso del tiempo. En esta presentación reflexionaremos sobre los distintos tipos de motivación —intrínseca y extrínseca— y la importancia de establecer metas claras mediante la metodología SMART. Además, se presentarán herramientas para fomentar la autodisciplina y la formación de hábitos que sostengan el estudio de manera constante, como rutinas diarias, organización del espacio y recompensas adecuadas. Un punto clave será la autorregulación emocional, pues el aprendizaje también implica manejar la ansiedad, la frustración y el cansancio. Aquí se destacará cómo la autoeficacia, es decir, la creencia en la propia capacidad de lograr un objetivo, tiene un impacto directo en la perseverancia. Este tema busca que los estudiantes comprendan que el aprendizaje autónomo no se limita a técnicas, sino que requiere una actitud positiva, resiliente y comprometida consigo mismos.
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